Valores añadidos, un buen negocio

A veces no sólo en el comercio electrónico, sino también en el tradicional, nos confundimos pensando en que sólo las grandes inversiones son las que nos reportarán grandes beneficios, y eso es un error.

No por invertir más, se recauda más, en muchos casos, pequeñas inversiones reportan muchos beneficios y consiguen aumentar la rentabilidad de nuestras empresas.

Hoy quiero hablarles de los valores añadidos, muy olvidados por la mayoría de empresarios. Por ejemplo, supongamos que usted vende en su tienda online o en su tienda física, zapatos, tiene una zapatería y vende sólo zapatos.

Con lo que el 100% de sus ingresos es de su único tipo de artículo, el zapato, pero, si además de zapatos vendiese por ejemplo relojes de diseño y complementos, tiene muchas más posibilidades de hacer negocio, ¿no es cierto?.

¿Y porqué no vender algunos productos de peletería, carteras, encendedores, bolígrafos o sombreros?

Los empresarios que deciden aumentar los valores añadidos en su negocio, llegan a aumentar sus ventas en más de un 200%, sólo por el simple hecho de abrir su espectro de mercadería.

Hay muchos tipos de valores añadidos, los hay como hemos visto antes en productos que uno compra directamente y lo expone en su negocio, y los hay que otras empresas nos las dejan en depósito para hacer negocio con ellas, con lo que además no invertimos nada.

Para todo tipo de negocios hay valores añadidos, a veces, esos valores añadidos no tienen porqué tener relación con nuestra actividad, pero si complementarse por el tipo de cliente que nos visite.

Veamos, supongamos que tenemos una tienda online de recetas de cocina, podemos dar la posibilidad a los clientes de esta tienda online, de que compre un juego de cuchillos fabulosos. E inclusive un juego de batería, o un electrodoméstico para concinar, o ralladores, adornos para el frigorífico, etc...

Todos los negocios tienen la posibilidad de incrementar sus ventas mediante los valores añadidos, y así aumentar la rentabilidad de su negocio, personalmente lo recomiendo, porque cuando un empresario decide aplicarlo, se alegra.